Ultrasonido obstétrico estructural del segundo trimestre
También como conocido como ultrasonido morfológico, se trata de un tipo de ultrasonido que se realiza generalmente entre las semanas 18 a 22 de gestación, con el fin de detectar anormalidades (malformaciones) morfológicas o estructurales (de ahí su nombre) en su bebé. Es realizado a través del abdomen.
A diferencia del ultrasonido obstétrico convencional, se realiza una exploración detallada del bebé en desarrollo, que incluye:
Aunque se trata de un tipo de ultrasonido muy completo, no se descartan el 100% de posibles enfermedades, ya que existen alteraciones que no tienen una manifestación anatómica (es decir, que no se ven mediante el ultrasonido), no obstante, un ultrasonido obstétrico estructural normal permite afirmar con una probabilidad del 98% que el bebé no tiene una alteración cromosómica (genética).
A diferencia del ultrasonido obstétrico convencional, se realiza una exploración detallada del bebé en desarrollo, que incluye:
- La anatomía del bebé. Se visualiza la totalidad de la anatomía del bebé, de la cabeza a los pies. Entre otras estructuras se incluye:
- Cerebro.
- Cerebelo.
- Cara.
- Pulmones.
- Corazón.
- Intestino.
- Estómago.
- Riñones.
- Vejiga.
- Genitales (sexo del bebé).
- Brazos.
- Piernas.
- Se realiza conteo de dedos de las manos y de los pies.
- Frecuencia y ritmo cardiaco.
- La posición y maduración de la placenta.
- El cordón umbilical.
- La cantidad de líquido amniótico.
- El útero.
Aunque se trata de un tipo de ultrasonido muy completo, no se descartan el 100% de posibles enfermedades, ya que existen alteraciones que no tienen una manifestación anatómica (es decir, que no se ven mediante el ultrasonido), no obstante, un ultrasonido obstétrico estructural normal permite afirmar con una probabilidad del 98% que el bebé no tiene una alteración cromosómica (genética).